lunes, 7 de noviembre de 2011

Demanda (Marcelo Gobbi)





Daneri en tribunales

Se burla Borges del poeta Carlos Argentino Daneri, cuya actividad mental era “continua, apasionada, versátil y del todo insignificante”:

“Me releyó, después, cuatro o cinco páginas del poema. Las había corregido según un depravado principio de ostentación verbal: donde antes escribió azulado, ahora abundaba en azulino, azulenco y hasta azulillo. La palabra lechoso no era bastante fea para él; en la impetuosa descripción de un lavadero de lanas, prefería lactario, lactinoso, lactescente, lechal.”


Un tribunal argentino quiere decir que el recurso extraordinario solamente debe abrirse contra sentencias definitivas, para evitar que los juicios demoren demasiado:

“Ha sido tan recurrente la preocupación por el tema de la definitividad de la sentencia a los fines del remedio extraordinario, que la jurisprudencia y la doctrina han demorado largamente en penetrar por sus costados fragmentados, recurriéndose al concepto de gravamen irreparable que no reconoce límites precisos, lo cual de producir un ensanchamiento sin perfiles, produciría un concreto y nítido desorden del proceso, alongándolo a través de recursos extraordinarios que conllevaría, a una insuficiente y demorada justicia. (Corte Sup. Just. Santa Fe, 13/04/1988, Sacreu SCA. v. Isalex SA)”


Otro cuenta que el demandado apeló porque la sentencia no había seguido el consejo del perito psicólogo, que había opinado que él no estaba enfermo:

“Rezonga el demandado reconviniente porque argumenta que el Sr. juez de mérito soslayó el resultado de la experticia psicológica realizada a la accionante, de la que se desprende la existencia de una neurosis mixta, mientras que a su respecto, esa prueba concluyó que el desconforme no presentó rasgos psicopatológicos. (C. N. Civ., Sala G, 6/6/2010,M., A. M. c/ C.E.L. s/ divorcio, expediente n°100.582/2005)”

La vida imita al arte. Daneri “era autoritario, pero también ineficaz”.




 Marcelo Gobbi


5 comentarios:

  1. Gracioso, irónico, cierto.

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  2. Como citas a Borges, no sé si estas imitándolo y todo es un invento descabellado con las páginas de legajos y todo... ¿o es verdad? si es así, es increíble! Evidentemente la jurisprudencia es mucho más interesante de lo que yo creía! Y los que escriben tanto papelerío tienen más libertad que lo que aparentan. Eso sí ... la ineficacia hay que aguantarla...pero todo no se puede...

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  3. Señoras y Señores, les presento a la persona más seria que conozco: Marcelo Gobbi. Él sí sabe, definitivamente, por donde "pasa la cosa" y nos hará el honor de iniciarnos en esos misterios.
    Un mundo nuevo se desplegará ante todos ustedes a medida que vayan leyendo sus innumerables aportes (ya en carpeta) de los próximos meses. Es nuestro guía a la dimensión desconocida.

    ¡Ah! ¡Si Josef K. lo hubiera conocido! ¡Otro hubiera sido su destino!

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  4. La osadía de meterme en este grupo ha sido estimulada por la temeraria Marisa. Yo creía que no iba a ser descubierto, pero mi amigo Roque me avisa ahora que el Fede Caivano de acá es el mismo que yo conocí de chiquito. Ups, tendré que portarme bien. Abrazos y gracias por dejarme pasar. Marcelo G.

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  5. La vida no imita al arte, y por suerte, ahora, el arte tampoco a la vida. Marcelo, estuve pensando seriamente en hacerte una respuesta a este relato tuyo construyendo otro relato pero con otro personaje de la segunda parte de Ficciones, y obviamente iba a ser Juan Dahlmann y en el Congreso, y sí, si Daneri estaba en Tribunales, Dalhmann tenía que estar en Congreso, allí, donde Sur y norte se dividen y convergen, pero la víctima de mi travesura no me dejó, y lo intenté, pero después de dos horas de intentar escribir, el tuyo quedó mejor, así es que nada, solo te envió mi ira y la de Gotan y que todos los dioses inmortales y nórdicos se acuerden de ti en este día.

    ¡Muy bueno, como buen amante de los personajes de Borges, lo pasé muy bien leyéndote!

    ¡Profesora Marisa, póngale 10!

    Martín

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