sábado, 14 de abril de 2012

Inercia (María Echevarría)

Charles Chaplin, Tiempos modernos
http://giannatiempo66.blogspot.com.ar/2012/02/mccarthysmo-charles-chaplin-la-caza-de.html



Algunos principios de año son tan movidos que casi parecen diciembres. La maquinaria de las nuevas rutinas es de lentos y pesados engranajes, cuesta echarla a andar sin que haya roces, trabas o frenadas abruptas. Detesto esta etapa del año. Es promisoria, es verdad; en el momento de planear un año entero parece que uno fuera capaz de todo y que los días serán de más de treinta horas, pero realmente llevar a la práctica lo planeado, eso, es harina de otro costal. Todavía no sé de memoria mis horarios, mi semana, lo que inevitablemente lleva a llegadas tardes, plantones, mensajitos de “¿dónde estás?”, llegar tarde a una clase atiborrada de gente y quedarme parada las dos horas, y unos cuantos etcéteras más. Pareciera que sufro mucho la inercia de las vacaciones, del no cursar, del relax post-exámenes. Me siento casi anhelando la inercia de la rutina ya establecida, del correr de un lado a otro, sabiendo exactamente a qué hora tengo que estar dónde. Como si extrañara el aceitado engranaje del diario trajín que agota al más fuerte. Sin embargo, cuando lo pienso así me asusta un poco pensar que de las vacaciones al año laboral, y viceversa, no hago más que intercambiar inercias. Como si mi vida fuera oponer la menor resistencia posible a esas fuerzas que dominan mis rutinas, para que todo transcurra del modo más apacible posible. Dejarme zarandear por los tiempos, tratando de que la inercia no dificulte la puesta en marcha de mecanismos que me exceden por completo.

No, definitivamente esto no me convence, algo voy a tener que hacer...


 María Echevarría

4 comentarios:

  1. ¡Doy fe María, de tus plantones! jaja
    Eso te pasa por tener muchas inquietudes.
    Tené cuidado, ¡mirá a Chaplin!

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    1. ¡No, Marisa! ¡No me digas eso! Creo que nunca te dejé plantada. Te avisé que no iba a algo que pensé que iba a poder ir, ¡pero avisé!

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    2. Sí, sí, Reina. Pero bien que te habías olvidado del evento, jajaja.

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  2. ¡Como te entiendo María! Para mí, la Fiaca sería una diosa si tuviéramos la visión del mundo de los griegos antiguos hoy. La evasión de la responsabilidad de esa inercia y el descansar al hundirnos en sus mullidos brazos de almohada es simplemente irresistible. ¡Terrible diosa enmascarada que obnubila con su belleza y mata futuros con sus abrazos!

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