martes, 19 de noviembre de 2013

Zíngaro (Teresita Suriani)





Veo puntos borrosos y muevo los pies. Camino un poco a ciegas y descubro la Via Cimarra. No hay  nadie pero se escuchan las manos de alguien. Me asomo a la ventana y un joven peinado con gel para el costado y vestido con chaleco negro ajustado, sentado en un taburete, arregla o fabrica un violín. Concentradísimo, sólo después de un rato se da cuenta que ojos intrusos lo espían. Sigue su trabajo impasible, la espalda encorvada, la frente arrugada. Toca cuerdas, clava clavos, golpetea sonidos, en la soledad de su taller. Via Cimarra sigue y a mi derecha en un cuarto chiquito, con puertas de vidrio, veo tres hombres escuchando atentamente una lección sobre la cultura helénica.
 Via Cimarra me conquistó un poco. ¿Será porque cada vez que vuelvo veo al violinista empeñado en su instrumento, y a un grupo de gente que trata de entender a los griegos? Y casi nunca dejo de encontrar lo mismo, porque en Via Cimarra se detiene un poco el tiempo y nunca alcanza para tener el violín perfecto. Y mis pies siguen esta rutina que tanto les gusta, y lo que más sorprende no es lo nuevo, sino que las cosas se sigan repitiendo.
Pero saliendo de Via Cimarra encontrás la Piazza dei Zingari. La plaza de gitanos encuentros, de birras y ruido y agua que sale de la fuente. Zingari significa ‘gitanos’ en italiano. Pueblo diseminado, movedizo, misterioso. Algunos dicen que la palabra viene de ‘intocable’. De nuevo la larga dicotomía, quietud y movimiento, lo uno y lo múltiple, ¿conviviendo? Los veo en mi Via Cimarra y en Piazza dei Zingari, los veo en mi vida y en mis clases de filosofía.
Y pienso que después de este día nada vuelve a ser lo mismo, pero, ¿alguna vez lo es?


María Teresita Suriani


4 comentarios:

  1. Muy bueno Tere! Me encantó la imagen del violinista, muy gráfica, siento que estoy yo ahí mirándolo.
    Volveee que no te veo hace miiiil y ya te extrañooo!! Besooo y que disfrutes!!!

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  2. ¡Qué bueno Teresita! Ya empiezan a llegarnos tus crónicas de la Ciudad de Dios, como la llama Pasolini. Te imagino con tu mirada asombrada caminando por esas callecitas. Todo tan nuevo y tan antiguo. Me gusto ese final. Corsi e ricorsi.

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  3. ¡Muy bueno, Tere! Tu mirada me hizo recordar a Scarlett Johansson en "Lost in translation", esa mirada de presencia y distancia, que recorre sin tiempo las cosas que se le presentan ahí, delante. Debe ser muy rica, esa experiencia.

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  4. Me encantó Tere. No sé lo que es una Vía Cimarra, pero, ¿será tu callecita allá en Roma? Me acuerdo que en tu departamento en Capital, ibas caminando y te saludabas a todos los de la cuadra, y sonreías, y estabas como contenta de verlos 'nuevamente'. Me encanta tu espíritu, porque no necesitas irte para descubrir lo bueno de la rutina, y de las cosas. Lo viejo para vos siempre es lo nuevo para mi. Admirable tu actitud. Creo que son esos ojos de niña que nunca perdiste, por eso te llevas tan bien con tu hermanita... o será que entre locos se entienden mejor? Un beso reina, te extraño.

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