“Kanagawa oki nami ura” (1830-33 aprox.) de Katsushika Hokusai -
Grabado
A Pepelucho Nakandakari, in
memoriam
Esa última ola
sepultó tu vida
pero no, tus ilusiones
ni tu querer.
Veloz como tu deportivo,
te fuiste sin nota
de despedida.
Si es verdad
lo del “caminante
no hay camino”,
entonces,
vos serías ese caminante…
Ese mar, esa arena,
ese sol, esa tabla surf,
ese verano,
ese invierno,
ese invierno,
esa ola,
ese adiós…
ese adiós…
MUY BUENO!!!! HECTOR.
ResponderEliminarME ENCANTA ESA ILUSTRACION, LA TENGO EN MI HABITACION.
ABRAZO
MAX
Quelindo expresas la despedida definitiva, porque se nota el dolor y la tristeza, pero tambien el amor definitivo que permanece con y en nosotros para siempre.
ResponderEliminarGracias.
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ResponderEliminar¡Qué tristeza cuando mueren estos jóvenes tan amantes de la vida! Es como si uno despidiera muchas vidas en su muerte.
ResponderEliminarTu homenaje Héctor, emana una tierna y rara belleza. Esa inmensa ola azul que celosa se lleva dentro de sí a tu querido "Pepelucho". Vida y naturaleza fundidos en un movimiento vigoroso, primitivo y letal.
Qué linda interpretación del caminante no hay camino... se podría seguir "se hace camino en la mar".
ResponderEliminarEstá muy bueno, Makishi, cómo lográs a partir de algo particular escribir con visos de universalidad.
Voy a googlear quién es Pepelucho. Me hizo acordar a la película "Punto límite" tan buena!!!
Saludos!
Angeles
pd a todos: estoy sin internet en casa, cuando me vuelva a conectar los leo!
Cuando aquello que te apasiona, por lo que vivís tu vida, te trae la misma muerte, es como que se cumple el último sacrificio a un dios arcano... como que finalmente eso que te apasionaba te exige todo, te viene a buscar... y algo increíble se cumple.
ResponderEliminarEs el mismo movimiento de la ola, que trae, que rompe, y que se vuelve a llevar.
Muy buena manera de convertir tu tristeza en poesía...
¡Genial!
Wooow que lindo poema. No hay mejor epitafio para Pepe. Nuestro querido primo 5to elemento. El amor hecho persona, su gran sonrisa iluminaba donde llegaba. Gracias por tan lindas palabras.
ResponderEliminarHola
ResponderEliminarsoy Monica, hermana de PepeLucho, manana 15 de junio seria su cumpleanos, Muchas gracias por ese lindo poema, yo aun con profunda tristeza y un dia a la vez aceptando su pronta partida.....
Gracias, por todos sus comentarios. Tal vez, deba aclarar quién fue Pepelucho. Fue un amigo de mi primo que luego se hizo amigo mío. Trabajé para él, como DJ en un negocio de música que él tenía. Conversábamos mucho siempre y tengo buenos recuerdos de él, desde estar subido a su Mitsubishi Eclipse a 240 km/h hasta conversaciones muy sinceras y de corazón. Él lamentablemente murió en este mayo último en Japón, víctima de un derrame, mientras surfeaba. Llegó a salir como pudo e ir al hospital, pero ya fue tarde. La noticia me conmovió mucho a pesar de no tener contacto con él, hace más de 17 años, y producto de toda esa sensación, salió este poema.
ResponderEliminarÁngeles, no creo que googleando vayas a encontrar mucho de él, aunque, su hermana encontró este poema, googleando.
Ni a su primo ni a su hermana los conocía. Fue su hermana quien googleando porque se acercaba el cumpleaños de Pepelucho, encontró el blog y el poema. Hace unos días se comunicó conmigo, nos presentamos, y me agradeció el homenaje que le rendí a su hermano. Qué bueno es saber que lo que uno escribe puede llegar al corazón del otro.
Pd. Perdonen por estar desaparecido sin comentarios, pero tengo días muy cargados. Ya me pondré al día.