Gustave
Moreau, Herácles y la Hidra de Lerna (1876)
La
Hidra de Lerna era uno de los Trabajos de Hércules. Tenía como cien cabezas y,
cada vez que el héroe cortaba una, otra nueva volvía a crecer en su lugar. Algo
así era. Hércules tuvo que solucionar el problema cortando las cien cabezas de
un saque. Está bien decir que las rebanó de un saque, porque parece un golpe de
esos de las películas de artes marciales japonesas: y los japoneses toman sake,
que es como un vino de arroz.
Y la
mitología contaba la historia de Argos, un monstruo de cien ojos. Por ese
motivo, nunca se dormía del todo (siempre le quedaba uno abierto). Pero Hermes,
el inventor de la lira, le durmió los cien ojos de un saque y lo mató. Creo que
es una buena moralización, porque nos enseña que debemos enfrentar a los
problemas en bloque. Aunque hay otros dichos que mandan resolverlos uno por
uno, tiempo al tiempo. En fin, no somos tan coherentes.
Raúl Lavalle
Qué bueno si uno pudiera acabar con los problemas de un sake. La mitología aparece aquí como la objetivación de un deseo permanente del hombre. A mi me gustaría ser Hércules o Hermes venciendo a mis Hidras y Argos interiores, cerrar sus (¿300?) ojos. Pero me encuentro siempre peleando las mismas batallas.
ResponderEliminar¡Quizás con el Chapulín Colorado llegue a un acuerdo!
Supongo que hay situaciones que para resolverlas hay que atravesarlas paso a paso y otras que hay que cortarlas de raíz, como decís enfrentarlas en bloque. Tal vez no sea incoherencia sino distintos métodos según las circunstancias. A mí me resulta más fácil la metodología drástica, de un saque. La que me cuesta es la otra, la perseverante y que va construyendo soluciones, tiempo al tiempo. Tal vez la mitología en conjunto presenta las distintas alternativas. Penélope tejiendo noche a noche, Electra esperando a su hermano, Andrómaca elucubrando alternativas para que su hijo viva sin ella traicionar a Héctor muerto (Racine). Seguramente cada uno sabe qué es lo que le falta aprender y tomar las que le convienen.
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