http://www.google.com.ar/imgres?q=manzanas&hl=es&biw=1366&bih=
La delicia de una manzana que cae en el momento
oportuno.
Cae silente en un
colchón,
Patina y se
desliza en blancas plumas
Con una mirada
cómplice.
Complicadamente,
Fue escogida
dentro del cajón de verdes manzanas, por una boca carnosa, viva, aunque
silenciosa.
Una manzana roja,
era esa que venenosa, fue contaminando la boca del mudo.
Un amor sin palabras, mudo, sin saber qué decir.
Morder la manzana, es hablar.
¿Qué palabra esperas escuchar?
MUY BUENO, HAY MUCHAS FRESCURA EN LAS IMAGENES.
ResponderEliminarMAX HÜNICKEN
Tu texto me trae a Blancanieves, a Adan y Eva. A la vulnerabilidad y la esperanza que hay en esas historias. Herida del rojo, esperanza del verde. ¿Qué palabra esperas escuchar? "La verdad es inseparable de la ilusión de que alguna vez entre las figuras de la apariencia surja, inaparente, la salvación." (TW Adorno, comentando el cuento de Blancanieves)
ResponderEliminarMuy buena la asociación del amor mudo con la "H" de hamor. Neologismos y metáforas.
ResponderEliminarLa respuesta a la pregunta final es tan inabarcable y misteriosa como segura. La vida entera, creo, que es respuesta de tal interrogante.
Clemen, me encanta tu estilo poético.
ResponderEliminarMuy buen escrito.
Gracias por los comentarios!!! Marisa, muy enriquecedor la asociación que hiciste con las manzanas, el pecado y la cita. Me hace leerme a mi misma como ajena, como desde otro lado, pero me encanta. Me invita a descubrirme.
ResponderEliminarIgnacio, pienso exactamente como vos. Y pienso que el miedo en responder es justamente ese. El miedo a atarnos a una palabra quiza...