martes, 11 de octubre de 2011

Chacota (María Sol Rufiner)


Escena de la Película Breakfast at Tiffani’s, Blake Edwards, 1961


-Espero no haber sido muy dura- dijo Sarita mientras subía a medias la escalera.
-Es que si no sos dura, no sería real…. Esto prueba que es real. La carta prueba que el asunto es real- dijo María mientras seguía a Sarita con la mirada unas escaleras más abajo.  Toda su vida María había luchado con la farsa. Lucha que se enraizaba en el tener en su cabeza metida la idea de que para que las cosas sean reales hay que encarnarlas.
-¿Más reales?- Preguntó Sarita con mirada de asombro hacia la joven que tenía enfrente.
-Sí, es que toda la vida me pasaba que  ponía todo el corazón en algo, y al final todo el mundo lo tomaba a la chacota.  Nadie le daba importancia a nada.  Tu reto Sari hace que la cosa sea real; no una broma.
Sarita se despidió un poco perpleja, pero habiendo entendido algo a su extraña y meditabunda alumna. Pero cuando María bajó, le esperaba la sorna burlona y amigable de sus compañeras, que al no entender su naturaleza contemplativa, la tomaban así…siempre para la chacota.

María Sol Rufiner

5 comentarios:

  1. ¡Gracias Sol!
    Me resultó interesante el juego de ideas que planteas entre la naturaleza contemplativa y la necesidad de encarnación.

    ¡Muy divertida la imagen!
    ¡Qué arte darse cuenta qué cosas son para tomarselas en broma y cuáles no!

    ¿Por qué será que la chacota y la broma son algo que se "toma", no? Como si fueran bebidas espirituosas.

    ResponderEliminar
  2. No sé si tenga que ver con lo que decís, Sol. Pero a veces me parece que tomarse algo a la chacota es una defensa instintiva. Tanto del que está proponiendo algo desde muy adentro como del que se da cuenta que justamente no es una pavada de lo que se está hablando. Todos estamos tentados a escaparnos por esas "válvulas", pero como no somos tontos (sino que sólo nos hacemos los tontos)las chacotas sólo logran cubrir las apariencias y en la profundidad entendemos muchas más cosas de las que reconocemos (a nosotros y a los demas). Pero está bueno, a veces, "alivianar" con estas bebidas el ambiente y las circunstancias.

    ResponderEliminar
  3. Muy cierto tu relato Sol! Y cuánto se sufre en este mundo de "liviandades" el sano peso de la realidad y del compromiso con ella.
    Muy buena reflexión!

    ResponderEliminar
  4. Sol

    Linda historia, aunque me quedó un poco corta, si tenías una página para escribir la hubieras usado, la personalidad de María parece ser bastante compleja, quizás saber un poco más de ella (con las limitaciones propias del taller), hubiera hecho menos rara a la rara, puesto que de cerca todos somos "raros".

    Desayuno en Tiffany es de mis películas favoritas, Audrey es perfecta allí y su superficialidad solo esconde una profundidad sin límites, muy buena idea ponerla como imagen de tu relato. Es la imagen que mejor coincide con el cuento de los que hasta ahora voy leyendo.

    ResponderEliminar
  5. Marisa: Spiritoso en Italiano es Bromista, y también se puede referir a una bebida fuerte y que te alegra. Es un tema dificil el de Encarnar las cosas, a veces nos quedan volando, otras la vida nos grita que no nos tomemos nada en serio. Esto último es lo que siempre me rebeló, es como si el mundo quisiera ser siempre parodia y no realidad.
    Por otro lado Angeles tiene razón a veces necesitamos de la risa y de la broma, Kirk dice que el lado cómico es necesario para el pensador subjetivo, o sea para el pensador que en su pasión por la Realidad es capaz de encarnarla. Pero es un tema el lograr distinguir el límite, entre la burla y la comicidad.
    Martín: Es un Flash de la vida de Alguien que todavía vive, quise mantenerlo así cortado, como cuando uno oye o ve algo al pasar, pero que te queda dando vueltas en la cabeza por mucho tiempo; como me pasó a mí cuando presencie esta escena. La ilustre con Desayuno en Tiffany porque es como si Holy en su desesperación por no tomarse la vida en serio paradójicamente lo hace más que todo el resto que la acompaña, por eso me encanta el detalle de que el gato como ella no tenga nombre. Es que Holy entiende el tema de que la realidad hay que Encarnarla y por eso lo busca a la vez que se escapa. Es una película genial.
    Ignacio: Gracias que bueno que te haya gustado!

    ResponderEliminar