Los Campanelli (Ilust.
Blog)
Mi amigo
Guillermo, hombre de costumbres algo conservadoras, fue amablemente invitado
por su suegra a que comenzara a tratarla de vos. Mi amigo le respondió: De acuerdo, Ana, muchas gracias por el
detalle, te voy a empezar a tutear. Pero a la primera que me hagas volvemos a
‘señora de acá, señora de allá.’ Pocos meses después Guillermo había
retomado el usted por razones que hasta hoy mantiene en reserva.
Es curioso
que el Código Civil argentino llame al vínculo que uno tiene con suegros y
cuñados parentesco por afinidad
(artículo 363). Siempre creí que esa denominación podría haber respondido a un
costado bromista del finado Dalmacio Vélez Sarsfield, pero ahora pienso que
acaso el nombre no sea del todo incorrecto.
El
diccionario de la Real Academia Española incluye una acepción química del
sustantivo afinidad: tendencia de los
átomos, moléculas o grupos moleculares a combinarse con otros.
Sin una
atracción recíproca no serían posibles las ocurrentes perradas que vinculan a
este tipo de parientes en cada encuentro, que alimentan el rencor por unos días
y que preparan a los contendientes para una nueva cita en que volverán a poner
a prueba su capacidad de ejecutar con sadismo pequeñas pero deliciosas
perversiones. Como los borgeanos Cardoso y Silveira, de El otro duelo, aquellos que acabaron
por sentir que ser compañeros les
permitía seguir siendo rivales, nuestros íntimos enemigos sólo descansarán
durante la semana para permitirse velar sus armas antes de repetir el convite,
que no será a batirse en un descampado al amanecer y con padrinos sino en una
sobremesa dominguera con café y masitas.
Marcelo Gobbi
Y sí es así, con los que "más nos cuesta" es con lo cercanos.
ResponderEliminarEse aspecto de la palabra "afinidad" es destacado en la novela de Goethe, "Las afinidades electivas". Allí se describe una afinidad erótica entre los personajes que los ata a un destino ineludible y trágico, como tu mesa de los domingos.
Acabo de volver a ver una película inglesa (debe tener más de 15 años) que se llama "Secretos y mentiras". Justamente trata ese tema de la inercia con que arrastramos vínculos contaminados.
Marcelo, me reí mucho leyendo tu descripción de estas relaciones de parentescos por afinidad, y lo de tendencia de los atomos buenísimo! Pero pensemos que con los atomos encontrados y moleculas tendenciosas tambien se puede crear una bomba atomica Ja ja.
ResponderEliminarAsí es Marcelo, por lo que deduzco de tu simpática explicación siempre existirá una afinidad (cosanguínea)con nuestros parientes, pero por otro lado seremos o no afines, según como se establezca esa "atracción recíproca". Y con los suegros, ¡qué situación difícil cuando no tenemos "química" con ellos!
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