Me gusta como suena "murmura el arrollo que arrullaron" (como si las palabras acompañaran la caida) e imaginarme la alegría del algua por irrigar la tierra.
¡La fuerza o presencia múltiple del agua! Desde el suave murmullo, a través del canto y la irrigación, a la fuerza de una vuelta, a una vuelta al mar, con sus olas, calmas y tempestades.
Creo que no hay sonido más pacificador que el del arroyo murmurando. Son como caricias del mundo al mundo, del mundo al hombre.
Como limpia el alma el agua de ese arroyo...
ResponderEliminarGracias Luis, muy bueno!
Me gusta como suena "murmura el arrollo que arrullaron" (como si las palabras acompañaran la caida) e imaginarme la alegría del algua por irrigar la tierra.
ResponderEliminar¡La fuerza o presencia múltiple del agua!
ResponderEliminarDesde el suave murmullo, a través del canto y la irrigación, a la fuerza de una vuelta, a una vuelta al mar, con sus olas, calmas y tempestades.
Creo que no hay sonido más pacificador que el del arroyo murmurando. Son como caricias del mundo al mundo, del mundo al hombre.
¡Gracias, Luis!