La huida a Egipto. Capilla de los Scrovegni de Padua.
Giotto di Bandone. 1305. (Ilust. blog)
Giotto di Bandone. 1305. (Ilust. blog)
Es desearles que el Mensaje de Jesús esté realmente presente en la vida de cada uno, de cada familia, de cada comunidad y de la sociedad entera.
Es triste ver que la tentación de consumismo que proviene del dios Mercado, uno de los grandes ídolos de nuestro tiempo, se hace más evidente en estas fiestas en que celebramos acontecimientos del nacimiento de Jesús, a tal punto que Su figura y el mensaje del Evangelio, quedan absolutamente desplazados.
Que sepamos reconocer a Jesús en cada hermano, sobre todo en el más pobre y necesitado.
Ángel Cejas
¿Y a Papá Noel? ¿Quién lo conoce? Y esos árboles ridículos llenos de nieve de algodón y personajes con bufanda… ¿Qué tienen que ver con nosotros? Nos trepamos con mucha facilidad a la calesita navideña. Fin de año nos encuentra sin energías para volver a las raíces, para nadar contracorriente. Es más fácil dejarse llevar…
ResponderEliminar¡Gracias Ángel por tu reflexión!
Cuánta razón, Jorge. Qué paradoja eso de la evidencia del consumismo en una fiesta donde se nos está hablando de algo diametralmente opuesto... gracias por los déseos de unas fiestas felices!
ResponderEliminarGracias igualmente Ángel!
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