jueves, 17 de noviembre de 2011

Domingo (María Lanusse)

Antonio Seguí, La ciudad de los chicos malos (Ilust. Blog)





Para vivir un domingo agradable en la Capital.

Si usted quiere seguir manteniendo ese ritmo tranquilo que llevamos “los del interior”, le aconsejo respetar a rajatabla los siguientes pasos:

Trate de levantarse de la cama alrededor de las diez de la mañana. Dormir hasta las tres de la tarde no hará que recupere el sueño perdido. Acéptelo, los porteños no conocen lo que es el horario para la siesta. Así que deje de salir de juerga y duerma en horarios prudentes.

Prepárese unos buenos mates. Sé que querrá tener unos bollos para acompañar, pero sino, pruebe con los bizcochitos Don Satur. La mayoría de los porteños, suele agarrar el diario en este momento. Yo le recomiendo evitarlo. Un domingo, es día de descanso, por lo tanto, comenzar el día viendo titulares como “Quejas a la AFIP por la restricción en la compra de dólares”, inconscientemente, provoca un negativismo para el resto del día. Además, seamos sinceros, para usted como estudiante, la restricción de los dólares no restringe sus salidas nocturnas.

Para el resto de la mañana, se recomienda salir a caminar. Por más que sabemos que el paisaje siempre es gris e impide poder quemarse como corresponde, el aire matutino y la tranquilidad de un domingo, quizá le recuerden un lunes en sus propios pagos. Lamentablemente, el ritmo del domingo porteño no suele ni acercarse al ritmo del domingo provinciano. Pero deje de quejarse y póngale onda.

Si es un día soleado y quiere comer al aire libre, la masa suele ir a las plazas. No se sienta incómodo cuando comience a ver mujeres en bikini y palanganas con agua para refrescarse. Es normal. Podríamos aplicarles la frase “para el hambre no hay pan duro”. Así que deje el pudor de lado y pele ese cuerpito.

Por la tarde, puede aprovechar para visitar otros espacios verdes, como Los bosques de Palermo, El Rosedal, La Represa, pero siempre teniendo en cuenta, que en todos lados habrá gente.

Si es un día frío o lluvioso, sé que querrá quedarse en casa para deprimirse pensando que estaría mucho mejor en su casa, con mamá preparando una buena torta para la tarde, así que no perderé el tiempo recomendándole programas. Quédese vagueando.

Entre las siete y las nueve, encontrará Misa en las Iglesias, puede elegir a su gusto. Eso sí, llegue temprano si quiere encontrar dónde sentarse.

A la noche, como sé que usted es estudiante, no le puedo recomendar un buen restaurante, su sueldo no se lo permite, así que puede conformarse con comida chatarra, total, McDonald´s y BurgerKing siempre están al alcance de la mano.

Para cerrar el día puede ver una película, pero no se ilusione, los cines no tienen 2x1 los domingos, así que entre en www.cuevana.tv y elija una película de su gusto.

De este modo, logrará tener un agradable domingo, a usted que tanto le cuesta estar lejos de sus pagos en un día tan familiar. No se rinda, todavía le quedan aproximadamente, 144 domingos más.



María Lanusse


10 comentarios:

  1. ¡Pobre María! ¡Qué mal que la estas pasando en Bs. As.! ¿De dónde sos? ¿Por qué te viste obligada a tanto sufrimiento?
    Me hiciste reír con tu mirada "del interior" sobre los porteños. Como los relatos de Eduardo Wilde sobre "la vida moderna".

    ¡Quizás te haga falta conocer un "porteñito" que te acompañe a tomar los "buenos mates" del domingo. ¡Vas a ver cómo no te va a importar dónde los tengas que tomar! Jajaja
    ¡Gracias! ¡Muy simpático!

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  2. Marita, muy bueno! totalmente identificada! voy a seguir tus consejos jaja. Nos deberíamos juntar los salteños los domingos pue, para no pasarla tan mal!!!

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  3. María

    A mí me encantan los porteños, Lima es más o menos como una provincia, pacata, hipócrita, repleta de formalismos y modales, todas las mamás se conocen, y todas las vidas están más o menos relacionadas. Todo lo que describes de Buenos Aires lo vi, pero con ojos de admiración. El anonimato me hizo sentir increíblemente bien, lo necesitaba.

    Tu relato fluye, es divertido y ameno, yo no lo leía tu relato como sufrimiento sino como ironía. Aunque el hecho de considerar a una masa con una personalidad única me genera conflicto…

    Ah, y a la misa a la que yo voy siempre encuentras lugar, eso es algo que me sorprendía de esta ciudad, que las iglesias están relativamente vacías en la mañana o los sábados en la noche, cosa que en mi ciudad nunca pasa, las misas allá siempre están llenas.

    Abrazo,

    Martín

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  4. Sí, sí. Yo también hablé de "sufrimiento" irónicamente.
    ¡Qué belleza Salta!

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  5. Jaja no la estoy pasando nada mal!! Solo era una vision de los primeros dias que tuvimos aca cuando apenas llegamos...Despues, siempre terminamos acomodandonos y aprovechando las ventajas que tienen los porteños obviamente! Jaja

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  6. Buenisimo bebe,muy divertido, y son comentarios tan tuyos.... con alegria y muy ironicos, siempre divertidos, pero yo leo que a pesar de ya estar hecha una citadina ..... extrañas salta!!!!!!!!! y yo tambien te extraño!!!!!!`pero ya falta menos para las vacaciones y podras darte una panzada de sol aire verde y tranquilidad.besos mam

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  7. Hace 144 rayitas en la pared y andá tachando de a una, eso sí, ponele al lado la foto de algún fulano que te esté pretendiendo frecuentar o en su defecto una mía.... jajajajaja BUENÍSIMO. En cada renglón seguís desparramando buena onda. GRACIAS Dentro de 5 domingos nos vemos.
    .

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  9. jajaja no te olvides del chocolate de las 3 de la tarde!!! y comprando las "mini" de MAC comes mas por menos... jajaja.. aca nadie lo comparte conmigo =( jaja Muy bueno gorda!!

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  10. Y yo que estoy disfrutando de Salta la linda, ese artículo me hizo reír... ¡Muy bueno María!Un beso grande y a sacarle ventajas a la estadía en Buenos Aires!...

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