Dios es inmutable, eso lo sabemos bien (de alguna manera). Sin embargo, existen divinidades menores que van cambiando según las épocas en las que se presenten, animando y sosteniendo al mundo. Y puesto que éste es siempre cambiante, es lógico que las divinidades cambien con él.
En nuestra era nos encontramos con que un nuevo panteón ha venido a rivalizar con el olímpico; los dioses informáticos. ¿Cómo se explica si no el repentino cambio de humor que parecen sufrir las computadoras cuando no obedecen nuestros comandos? ¿Por qué a veces dos acciones iguales bajo las mismas condiciones crean resultados diferentes? ¿Será acaso la obra de un virus? Pero los virus también tienen un origen mitológico, oculto y terrible. Ellos también son enviados cuales demoníacos espíritus a acecharnos, poniéndonos palitos en la rueda sólo por el hecho de molestarnos. Por suerte no estamos solos y contamos con la ayuda bienhechora de los antivirus, ángeles guardianes que viven para protegernos.
Claro que dentro de este marco también hay lugar para una interpretación metafísica del nuevo sistema de creencias; baste decir, para no irnos por las ramas, que detrás del mouse se esconde una analogía antropológica con la inteligencia (botón derecho) y la voluntad (botón izquierdo).
El reino de lo material (hardware) y lo inmaterial (software) se funden también, por lo tanto, en esta nueva mitología dando lugar a relatos misteriosos de diverso tipo: archivos que desaparecen sin razón, disqueteras hambrientas que se alimentan de CDs y DVDs, parlantes que se niegan a reproducir música que no les gusta…
Pero estas divinidades no son siempre tan caprichosas. Cuentan algunos que cuando alguien obra con justicia llega a los oídos de Sistoperat, Rey de los dioses, por medio de Motorbusquê el mensajero y su Ctrl+F (buscar). Encontrado el recipiente de la recompensa, Sistoperat le concede a éste un Ctrl+Z (deshacer) para volver a tomar una decisión de la cual se arrepintió, como regalo por su buena acción. Claro que nadie sabe de esto porque todos se lo guardan para sí por temor a parecer locos.
Tampoco hay que olvidar a su hermano menor, Sisterror, el celoso, que nos envía cada tanto un Ctrl+C y Ctrl+V (copiar y pegar) enloquecedor que nosotros hemos dado en llamar dejà vu. Muchos le reprochan a Sisterror el haber creado los virus. Pero él responde siempre que en realidad son fruto de la propia malicia humana, y que él sólo está para evitar que nos quedemos demasiado inactivos frente a ellos. Wikipedia, la diosa de la sabiduría, prefiere mantenerse prudentemente fuera de la discusión y por eso, si bien nos regala el poder de compartir conocimiento entre nosotros, decide no revelarnos de forma directa esta situación. Todo lo que tenemos de este tópos kybernetikós son los mitos que se están empezando a formar y que sin duda inspirarán versos y música de todo tipo. Sólo esperemos que estos nuevos dioses no decidan usar su fulminante Alt+F4 (cerrar) en nosotros, mandándonos al inframundo. Claro que este hades no es un lugar físico, sino la privación de la divinidad, el castigo supremo, la vuelta al papel, el lápiz y la goma en vez de la bendición de la pantalla y el teclado. Dios no lo permita.
16/11/11 update: el 11/11/11 se me cortó misteriosamente Internet. ¿Casualidad?
Federico Caivano
¡Me hiciste reír Fede! ¡Me encantó lo de los ángeles guardianes y lo del "hombre-ratón"! Faltaría ahora que nos instruyas a los feligreses con algunos ritos litúrgicos que nos permitan "manipular a los dioses" y así alcanzar una paz duradera. O que escribas un catecismo que podamos cumplir celosamente para no irritarlos. ¡Yo te voto para Papa!
ResponderEliminarBuenísimo!!!!
ResponderEliminarmuy divertido!
ResponderEliminarMuy bueno... no nos olvidemos de los pragmáticos chamanes informáticos que, algún obolo mediante, se ofrecen para restaurar nuestra relación con los dioses informáticos... y siempre la suciedad de la materia (hardware) se lleva su parte...
ResponderEliminarFede, estos problemas claramente son causados por aquellos que buscan unir elementos a discrecion, instalando softwares incompletos en hardwares incapaces, con la unica intencion de llenar sus bolsillos. Solo aquellos que vemos que unicamente en una unión natural entre estos aspectos vamos a poder llevar una vida informatica feliz. En otras plabras, todos aquellos que usamos Mac.
ResponderEliminarMmm... Siempre desconfié de Apple. Su logo es claramente un símbolo de la manzana mordida que constituyó el pecado original y, por lo tanto, de la tentación. Nótese que la primera computadora Apple se vendía a $666,66 (averigüen si no me creen).
ResponderEliminarAcá va otro video sobre mitología electrónica para los amantes del Tetris: http://www.collegehumor.com/video/5767906/the-tetris-god