tag:blogger.com,1999:blog-8406260495967687391.post1621367960994056013..comments2023-06-14T06:35:25.782-03:00Comments on In girum imus nocte...: Xenofobia – en clave canina (Estanislao Zuzek)In girum imus noctehttp://www.blogger.com/profile/02465306992251180618noreply@blogger.comBlogger3125tag:blogger.com,1999:blog-8406260495967687391.post-68032339584897035872013-09-10T18:14:37.078-03:002013-09-10T18:14:37.078-03:00Me encariñé con Daki. Un genio! Me encariñé con Daki. Un genio! Lydia Znoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8406260495967687391.post-63007821319991245062013-09-08T16:09:02.727-03:002013-09-08T16:09:02.727-03:00Marisa, muchas gracias por su comentario! Hasta ha...Marisa, muchas gracias por su comentario! Hasta hace unos años yo también era de pasear por el barrio con el perro tirando de la correa, por supuesto; sumido en un mundo de gruñidos amenazantes y ladridos de diverso calibre, desde los más graves hasta esos chillones e histéricos a la vez; y por otra parte, de corridas perrunas tras las verjas y alambrados o en la calle, sobre la entrada a su dominio. Y me pude dar cuenta que, muy en general esa aparente agresividad es miedo esencialmente. Temor a que le invadan su terreno - ¿quizás terruño? - y, naturalmente, claman con sus ladridos para dar la alerta a sus patrones y... también al paseador, a modo de advertencia. El acto de hacerle olisquear mi dedo índice, extendiendo la mano hacia alguno de ellos, infundía confianza y lo sosegaba. Pero, mientras tanto, el "ladrerío concertante" ya se había extendido una cuadra hacia adelante por lo menos y también por las calles transverales. Y así sucesivamente... hasta el regreso a casa dónde la vuelta de perro concluía. En razón de semejante alboroto y por respeto a lo sagrado de la siesta del vecindario, en especial la dominguera, hemos adoptado la decisión de salir a recorrer el barrio a media tarde, después de la hora del té. Obviamente, eso no lograba bajar en nada los decibeles de ese xenofóbico concierto canino. El miedo, el recelo, el rechazo 'por las dudas', la potencial invasión del dominio propio,etc... como causales. Si hay alguna similitud con el mundo de nosotros los bípedos, me imagino que será pura casualidad, ¿no? - Es sugestiva la insistencia del Papa Francisco sobre la necesidad de abrirnos al otro y de dejar atrás prejuicios... Estanislao Z.noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8406260495967687391.post-37216988243901304112013-09-08T10:29:50.059-03:002013-09-08T10:29:50.059-03:00¡Pobre Daki! ¡Qué triste final! Me enterneció esa ...¡Pobre Daki! ¡Qué triste final! Me enterneció esa historia acerca de que él solito se hacia atar cuando su mama iba de compras.<br /><br />Yo salgo mucho a caminar por las calles del barrio y hay cuadras donde los ladridos de los perros son muy agresivos a mi paso. Para ellos todos somos enemigos potenciales. Y compiten de casa en casa a ver cuál ladra mas fuerte. Es muy molesto. A veces doblando la esquina se lanza un perro de golpe contra el alambrado de la casa chumbándome feroz y me deja con taquicardia un rato... No me resultan nada simpáticos. Entiendo a la gente de su cuadra Estanislao.<br /><br />¡Gracias por sus recuerdos! <br /><br />Marisa Mnoreply@blogger.com